«ME QUIERO RETIRAR CON LOS CHICOS QUE PREPARÉ»

Dialogamos con EMILIANO RODRÍGUEZ, uno de los instructores y organizadores de la disciplina desde sus inicios, hoy capeando el temporal en dos frentes: el de su tarea como camillero en un hopital público y el otro como integrante del staff de #camioneros Rugby.
– Fueron uno meses tremendo Emiliano…
– La verdad que sí, sabido es que estuvimos respetando lo que es el protocolo de Pandemia Mundial, nos toca vivir, sentir y ver cosas tremendas, que no estábamos preparados.
– ¿Hablamos de Rugby?, ¿Dejaste de jugar?.
– No, mirá!, justamente había realizado una pretemporada bárbara, la mejor de los últimos 7 años. Incluso con Pablo Lecaditto coincidimos «es increíble como te estás entrenando», me dijo. La verdad es que quiero jugar uno o dos años más para poder disfrutarlo con los primeros chicos que llegan al plantel superior y que yo entrené.
– ¡Que buena manera de cerrar ese ciclo!.
– Si. Es una promesa que hice en el club, no soy un tipo de prometer mucho, pero a fines de 2016 les dije «Yo me voy a retirar cuando pueda compartir una cancha con ustedes por un torneo oficial», así que me quedan dos añitos para esperarlos y dedicarme luego a dirigir y coordinar un poco, pero todavía me queda un poquitito de hilo en el carretel y quiero disfrutarlo.
– La actividad creció en forma sustancial…
– Cuando empezamos había mucha incertidumbre, algo nuevo. Si bien teníamos claro hacia donde íbamos y los objetivos, había que arrancar. Teníamos un plantel más o menos conformado de lo que era Mandinga y nuestro objetivo era infantiles y juveniles con «sangre original» con sentido de pertenencia, que amen la camiseta.

– ¿Y se fue dando?.
– Claro!, porque los chicos fueron creciendo y se fueron ganando minutos en el plantel superior, el crecimiento fue increible. Antes de la Pandemia teníamos 350 chicos pero ojo!, lo hablamos a nivel unión y entre los técnicos, la mayoría de los clubes se van a tener que refundar y salir a buscar a los chicos a la casa. Porque si bien hay muchas ganas, en los clubes de nuestro nivel, clase trabajadora, no se pueden desconocer que muchos trabajan, ayudan en las casas, son peones de albañil, otros ayudan en algún negocio para llevar un Manguito a la casa. Vamos a tener que dedicarle mucho tiempo para atraerlos nuevamente para regresar a las bases a través del deporte, con respeto y los valores que se les inculcan que me parecen fundamentales sobre nuestra sociedad.
– Y cuando toda esta pesadilla culmine ¿dónde estarás mejor?.
– A mi me gusta estar en la cancha, quizás seguiremos como formadores y técnicos. Si se necesita también ocuparé como ahora el cargo de dirigente, ahora necesito más tiempo para la parte administrativa y organizativa pero quiero estar con los chicos. Esa es mi terapia, mi psicólogo, mi terapia ver a los chicos divirtiéndose, con una sonrisa un poco de pasto y una pelota de Rugby.