EDITORIAL: «¿A ESO LE LLAMÁN SUERTE?»

Siempre sostuvimos que se nace con condiciones para poder jugar al fútbol. Pero también creemos que un chico puede perfeccionar esas aptitudes naturales y para eso existe un solo camino, las divisiones menores, siempre y cuando se trabaje bien. Para ello, es necesario que los clubes, en su gran mayoría, revean su política en la materia. Yendo al «Grano» un técnico nos marcaba «fijate que en el fútbol juvenil hay principios básicos y no se cumplen», y sin dudarlo cuando el jugador llega a Primera se notan las enormes falencias a la hora de aplicarlas.
UN CAMBIO DE RUTA
Camioneros ha pensado en cambiar sustancialmente lo que venía desarrollando y ahora modificó en gran parte, en el plantel y las ubicaciones de su equipo técnico. Ahora…nos surge la pregunta del Millón ¿esperan los diferentes clubes los procesos o cuando los números no den buscarán un reemplazo inmediato?. Porque también es cierto que resultados se consiguieron, pero la verdad es que al término de cada jornada, la consulta que llega y siempre es la misma «Como salieron» y no, ¡Como jugaron!. Uno que enseñe a atajar, otro a cabecear, un tercero a pegarle a la pelota, y así hasta cubrir los fundamentos esenciales del fútbol. A esto se apuntará en CAMIONEROS.
UNA LÍNEA DEL TIEMPO
Esta tarea debe ser coordinada por quien debe observar fehacientemente por encima, quien es lógicamente, el encargado del trabajo de los entrenadores con los chicos en el equipo. Esto para nosotros es fundamental. Porque así como nadie llega a las universidades sin haber pasado antes por los cursos de primaria y secundaria, no vemos motivos para que en el fútbol no ocurra lo mismo. Cuando pibes teníamos berretines al finalizar el picado en el potrero o en la calle (con menos tránsito que ahora, claro) y nos quedábamos pateando horas con una Pulpo contra una pared o el cordón de la calle, con derecha y con zurda, ese ejercicio simple, servía para ir mecanizando el remate, pero es cierto lo que algunos técnicos de primera nos comentan: «Los pibes llegan con pocas bases de abajo y fallan en cosas básicas, ni hablar en la zona de definición. Muchos clubes por la necesidad de vender «Cocinan» a sus jugadores promoviéndolos sin haber quemado las etapas necesarias».
JUGAR  CON EL MISMO LIBRETO
Decía un delantero famoso en una charla de café «Yo entrenaba como cualquiera, pero cuando todos se iban me quedaba horas y horas frente al arco…los arqueros quedaban muertos y yo buscaba la perfección, porque de nada vale un remate sino tiene dirección». Es distinto en éstos momentos, toca el silbato y los jugadores se van urgente. Y es verdad, cuando concurrimos a algún entrenamiento hoy en día y vemos como los futbolistas tiran al arco, y sobre todo en las divisionales de ascenso, se falla demasiado y el arco es grande 7,32 x 2,44. El problema es ponerla donde uno quiere y donde más le duele al que ataja.
En su última temporada en Boca, llegaron de un canal de televisión y pidieron una nota medio exótica a Maradona.
La idea era pegarle al travesaño desde afuera del área con la pelota en movimiento varias veces. Los compañeros lo cargaban por la suerte que había tenido y el les gritó..»¡ que suerte ! Para conseguir esa puntería trabajé toda mi vida» y era Diego…