EL KARMA QUEDÓ ATRÁS

“Cuando yo canto el entusiasmo de emocionarse no estoy diciendo que la patriada sea fácil, simple y dulce. La injusticia está ahí, y harían falta muchas cegueras para no verlas, lo que digo es que hay que tomar con las dos manos el dolor y la alegría, y enfrentarse con la misma pasión con la que nos enfrentamos a los éxitos”. CAMIONEROS clasificó a octavos de final del Torneo del Interior y lo hizo con el corazón en la mano. Perdió su partido frente al bravo e hidalgo Sportman de Areco, que estuvo muy cerca de forzar a los penales. Lo primero que hay decir es que el equipo locatario lo ganó bien al partido, fue más que el Verde y jugado por el resultado de los primeros ’90 puso todo lo que tenía en pos del triunfo. Y si bien Nazar había puesto en ventaja a Camioneros tras un centro desde la izquierda de Marcos Villalba, con un frentazo justo ante la marca de Rodriguez a los 2′ de juego, el Lobo encontró rápidamente la igualdad tras remate de Martínez de zurda, clavándola pegada al caño izquierdo de Regules a los 4′ del primer capítulo. Pintaba para un partidazo y así fue. Inconexo, confundido y sin una salida clara, la visita buscaba los caminos más difíciles para llegar a Sebastián Barrios y mediante a una excelente planificación de Oschiaupur y Horacio Bongiovani, presionaban en toda la cancha, haciéndola más corta. Llegó una jugada polémica, y fue cuando a los 27′ una escapada de Pavone y a posteriori un centro, encontró la pierna de Lucas Fernández y Espinoza cruzando la mandó al fondo, en contra. Pero, el línea I Roberto Nuñez, entendió que había posición adelantada e hizo anular la conquista. Los jugadores de Sportman y todo el cuerpo técnico se le fueron encima y a pesar de los reclamos el fallo no se modifico. El clima entró en ebullición, cada falta era violenta y cada fallo discutido, e inclusive hubo dos penales que el juez ignoró, uno a Nazar y otro a Herrera. En el complemento la temperatura subió aún más, Giacone a los 6′ y Mauro Martinez de tiro libre a los 26′, ponían el pleito 3 a 1 y daba toda la sensación que el Mirasol estaba más cerca del milagro que Camioneros del descuento. Y por más que Smaldone se desgañitaba intentando sacar a su equipo desde atrás, la cancha estaba literalmente inclinada hacia la ruta 5 (el arco de Regules). Cada pelota parada era una puñalada para la defensa, y todavía salió lesionado Machado. Ahí se sentían las ausencias de Blanco y Martinez. Uno para tenerla, generar y darle la pausa. El otro para quitar, asistir y distribuir en la mitad. Y aunque los que entraron dejaron hasta la última gota de sudor adentro del terreno, el funcionamiento indudablemente se resintió. Sobre el epílogo Regules, el palo y la fortuna jugaronpara Camioneros, hasta que en el tercer minuto de descuento Herrera asistió a Federico Gonzalez y el ex delantero de Español, de contragolpe, sin marca alguna selló la llave y el resultado: 3 a 2 para Sportman. Se superaron dos escollos fundamentales: Al durísimo equipo de Areco y al karma de no haber podido pasar nunca los Octavos de final. Por eso este cocktail: la risa, el llanto, el esfuerzo, el trabajo, los sueños compartidos. Cuando esas paredes comienzan a albergar toda esta historia, aquel sufrimiento de Chivilcoy se nos hizo entrañable, querido, amable, porque lo que cuesta vale y se aprende a valorar. (Daniel Geller)